miércoles, 29 de octubre de 2008

Monstruo de diez minutos


El monstruo que ella dibujaba era un simpático cabezón, con un ojo mas grande que otro, con solo una oreja, pelo con coletas, sin nariz y con boquita de piñón. Esperpento con cefalotorso, brazos y piernas adosados al mismo, manos como florecillas y pies como trolebuses.

Era un monstruo orgulloso, uno mas de una gran familia de muchos colores, grandes monstruos y pequeños, casi todos redondos, pero también aplatanados como él, cilindricos, ovoides. El pertenecía a esa clase de desvío genético de la especie, dentro de la variedad rosa. Lo del pelo era también una novedad, sus antecesores habían sido normalmente calvos.

Se paseaba con pompa patosa por sus dos dimensiones de papel blanco, un enorme folio A3, plagado de otros monstruitos familiares, todos mas pequeños, aunque algunos casi tan grandes como él. Se sentía el monstruo papá, con una prole indefinible de garabatos rosados. Había un par de marcianitos verdes, salidos de quien sabe que serie de dibujos animados, un par de extraños turistas a los que miraban con suspicacia: no sería capaz de reemplazar sus estrábicas inmensidades por esos diminutos cíclopes verdes.

Estaban todos tan ensimismados en sus dos dimensiones, que no vieron, no atisbaron a reconocer hasta que fué demasiado tarde, el gigantesco y chorreante pincel rojo.

viernes, 10 de octubre de 2008

¿Alguien sabe lo que está pasando?

El circo de la macroeconomía y la geopolítica nos viene ofreciendo ultimamente un espectáculo a cuatro pistas que ni el Cirque du Soleil. Acostumbro (mas por imposición que por elección, pero admito que tiene su morbillo) a visionar uno o dos telediarios los dias laborales a la hora de comer. Me maravilla como, de forma unánime en todas las cadenas, se suceden noticias de quiebras, hundimientos, bolsas desquiciadas y bancos de los que nunca oíste hablar (graciosos los Freddie y Fannie esos, parecen unos duendecillos, de esos que esconden la olla llena de oro...). Situaciones históricas, cataclismos monetarios, medidas excepcionales y nunca vistas, vamos, todo un panorama que al común de los mortales nos sobrepasa, y todo ello aderezado con multitud de detalles. Es evidente que quieren que nos enteremos.

Yo la verdad asisto a todo esto con la eterna duda, con esa sensación de saber que no sabes lo que está pasando. Lógicamente, internet no ayuda. El patio de vecinos que es esto da pié a una rumorologia constante que, desde luego, no aclara el qué es lo que pasa (aunque es mas sano un embrollo de dudas que un creerse a pié juntillas una 'versión oficial'), plagada de conspiranoias a cual mas creible (ese es el problema que tienen, que como mínimo se hacen tan verosímiles como las versiones oficiales, a menudo mucho mas)

Lo que me queda claro es lo siguiente, a riesgo de parecer ingenua:

- El nivel de aceptación de la televisión hace que nos veamos ante la maquinaria de propaganda mas eficaz y efectiva desde tiempos de la II Guerra. Es preocupante que personas como Murdoch, o Berlusconi sean dueños directos de esos medios de comunicación unidireccionales.

- Las noticias son selectivas. Te enteras del hundimiento de AIG (¿y quien era ese?) pero apenas de que empresas se llevan el beneficio (y cuanto) de la Guerra del Coltán. Cuando hay un incendio, seguro hay alguien robando sin que nadie le moleste justo en dirección contraria.

- Hay un montón de gente (montón que casi puedes contar con los dedos de las manos y los pies) que atesora casi toda la riqueza del planeta. Gente con tradición en manterse en el poder (véase las monarquías europeas) y gente recién llegada pero venida a quedarse. Si lo han hecho anteriormente... ¿no serían capaces de hacer lo que sea para seguir estando arriba?

- Existen unos medios como no han habido jamás. No hay mas que ver lo que podemos hacer con nuestros ordenadores domésticos de 400€... con dinero ¿que capacidad de computación no se es capaz de generar?

- Lo anterior viene a colación de lo siguiente: ¿hasta que punto, en este mundo globalizado, mediante cálculos, simulaciones, estadisticas... hasta que punto somos predecibles como sociedad, como masa?

- Continuamos pues, pese a todos los anuncios de crisis, en este sistema que se dedica a saquear el medio y a gran parte de la población, y no tiene pinta de que per se vaya a ir a algo que sea a mejor.

Bueno, pues esas dudas y muchas mas son las que me rondan con tanto atracón económico. El corolario, que no la conclusión, es que el pato de todo esto lo seguimos pagando, y parece que va a ir a mas, los de siempre. No contentos con nuestro tiempo, con nuestra salud, ahora también quieren (más) nuestro dinero. Y mientras nosotros nos quejamos, así, de mentirijillas, en el sur se siguen muriendo de hambre para que la fiesta del capitalismo no decaiga.

Al menos un mérito se les debe reconocer. Han sido eficaces desactivando el movimiento antiglobalización. Esto era justo lo que queríamos evitar. ¿Cuanto mas habremos de aguantar para volver a las calles?

Ah, va por ti, EME
Y por tí, ED