Anoche mi hija se fué a dormir más tarde por que los aficionados a determinado equipo de futbol estaban celebrando con todo el ruido posible, alaridos, petardos, bocinas y demás la victoria de su equipo.
Ayer, en medio de un ensayo, se paró el mismo para consultar el estado del partido vía móvil.
El otro día, cuando las madres de mi colegio me comunicaron que se iban de comida y que mi mujer (no yo) estaba invitada (debe ser discriminación positiva), miré a los padres que había presentes y... ¿de que hablaban? Del próximo partido. Luego quieren que los hombres sean distintos de como son (por que lo quieren, ¿no?)
Bueno, pues acabo de decidir que voy a ser activa en esto del futbol. De forma negativa, no nos malinterpretemos. Me posiciono de forma rotunda contra la difusión, comentario, apoyo o participación en cualquier cosa que tan solo huela a futbol.
Motivos:
- Distracción interesada de la realidad: No pretendo que estemos todo el día hablando de la crisis, del petróleo, de las relaciones interpersonales, de la calidad de nuestra vida... pero estar todo el día hablando (cuando se habla) de futbol, supone no hablar, en ningún momento de cualquier otra cosa. Y eso interesa al poder.
- Manipulación política: Parece mentira como se juega con el futbol para manipular políticamente con las masas. Himnos, banderas, territorios, lenguas, si tienes a la gente cegada en el apoyo a su equipo, lo que diga este, como dice Wayoming, va a misa.
- Fomento de la ignorancia y la brutalidad: Causa pavor ver a la gente embrutecida cuando gana su equipo. Es la exaltación del burrismo, su cota máxima. No tiene nada que ver con el disfrute de una fiesta, con un trance o con una liberación, es simplemente barbaridad, debe ser lo mas parecido a un saqueo. Y lo peor es que la gente reconoce y disfruta ese 'sentirse idiota', debe ser el efecto Homer.
- Machismo: Luego nos quejamos, pero el futbol fomenta prácticamente todos los valores machistas, que no masculinos (no es lo mismo). Deporte de hombres, competitivo cuanto más, violento, de personas fuertes, decididas y que simplemente actúan, vencen y humillan al contrario ¿qué es un futbolista sino un super macho-man? Y lo peor es que, no sé si cada vez más, pero muchas mujeres comparten y apoyan estos valores.
- Falta de respeto: El que a mucha gente le guste el futbol no significa que a todos nos guste, no tenemos por qué aguantar sus ruidos, sus himnos, sus atascos, que nos destrocen las fuentes, sus gritos de gooool en mitad de la noche. Es sencillamente molesto y una falta de respeto a los vecinos.
- Falsa sensación de comunidad: Dicen que el futbol une. Claro que si, une contra el otro. No crea una verdadera cohesión social, divide en contrarios, en colores. El futbol no enfrenta cuando debieramos estar unidos.
Edito: buscando una imagen he encontrado esto.
2 comentarios:
Esto del fútbol es muy extraño. Esta tarde, un comentarista de un programa de radio de la SER de Barcelona ha propuesto a Guardiola para la presidencia del Gobierno...
En el curro hoy lo más de lo más era prepara cartelitos que anunciaban el triunfo para que cuando llegara uno de prácticas, que es del Madrid, supiera lo que es bueno.
Anoche la pitada contínua debió pararse a las 3 de la mañana. La gente cortaba el tráfico y zarandeaba los coches... con la gente dentro. Paraban los autobuses, se subían, chillaban, se bajaban y lo dejaban marchar... Pero lo debemos comprender, porque es sana alegría.Como también debemos alegrarnos de que la pitada también se repita intermitentemente hoy.
También tego amigos normales a los que les gusta el fútbol.
Todo es muy extraño, como digo.
Viva la esgrima!
Hoy he tenido la oportunidad de poner en práctica my antifutbolismo activo, sermoneando a los compañeros de oficina. Supongo que mi discurso no ha sido muy convincente (qué lastima que no existan los hiperenlaces en la conversación hablada), pues se han reído de mi. En cada lugar debe haber un loco raro, se ve que en este soy yo.
Lo curioso, es que sea yo el loco y elos los cuerdos. La verdad, eso explicaría muchas cosas sobre como percibimos la realidad.
Publicar un comentario